jueves, 26 de junio de 2014

Des-aparecer











Colaborar

Olvd

El lugar de la baranda que nadie ocupa. La tecla del computador que da miedo presionar. El lápiz lleno de tinta que se olvidó, y se reemplaza por otro nuevo. El espacio de la habitación que nunca se observó. Ese balcón del edificio que desde abajo nadie observa que nos observan desde él. La ventana de la casa tres de tu recorrido diario que nunca observaste, que siempre está la mascota como un peluche. El lugar de tu cuerpo que jamás lograrás imaginar. Esa esquina de tu propia casa que no conoces. Y por ahí entre medio de todas estas cosas, también hay un espacio para mí. Me presento.

martes, 24 de junio de 2014

Cuatro minutos; Voz en off

Están todos enfermándose. Es como un virus de inexplicable procedencia. Están dentro de un cuarto y yo estoy fuera. O mejor dicho, yo estoy dentro con ellos pero sin ellos, lo más apartada posible. No es que me den asco, bueno, en realidad es algo parecido, pero no propiamente tal. A mi derecha el calor y el frío directo. A mi izquierda menos luz, menos frío  y menos calor, pero al fin y al cabo hay calor y hay frío de todas formas. Me va a ir terrible, sólo porque rompí una parte del colegio vergonzosamente, pero lo hice, y lo considero como un logro adelantado: Un logro pequeño y un adelanto de la sorpresa que les espera hace meses. De vez en cuando es tan agradable sentirse sola rodeada de tanta gente... 


(130514)

Esconderme  Suponer  Acrecentar Sangre
 Lograr  Posponer  Madurar  Exiliar
 Manchar  Justificar  Sensatez Deplorable
 Sumisión  Relieves  Acariciar Vergüenza 
Enfrentarme Buscar Descender  Imperfección  
 Dolor Ascender Alergia Mentiras
 Tontería Rencor Dominio Maldecir Proyección 
Aparentar Luchar Pinzas 

lunes, 23 de junio de 2014

quizás mañana

Escuchar The Empyrean es como QUERER ponerse unos audífonos con la frecuencia más desgarradora que pueda existir en la naturaleza. Es caminar por B. Encalada en dirección sur y encontrarse con los árboles drogados. Es desviarse por los pasillos, esconderse del mundo, refugiarse en uno mismo y mentir a como de lugar. Es a veces confiar en nada seguro, pero simplemente confiar a ganar, y finalmente ganar. Tampoco sé qué es ganar ni qué es final, pero se siente tan bien y tan mal como escucharlo. 

Es recordar la sensación de nunca darse por vencida
y luego, caerse tres veces en el mismo lugar. 

Es esto lo que finalmente termina siendo.

domingo, 22 de junio de 2014

Maldita.

Una hoja es capaz de quitarme todos los sueños
las metas
el cansancio de los pasitos.

Una simple hoja con unos cuantos números
puede borrar de mi corazón
todas aquellas almas que quisiera sanar.

Una hoja, la misma palabra que adoro ver botada en las calles
hace que me sienta como ese pez
tratando de subir el árbol que tanto anhela.

Una hoja, tan solo eso, me basta para desistir
de lo que me hace levantar cada mañana,
¿y ahora qué?

sábado, 21 de junio de 2014

Carta para quién nunca existió.

Ya no te escribo, en más, ya casi no me acuerdo de ti. Poco sé si es que existes, o si aún vives aquí; ni si quiera sé si te casaste o si eres feliz.
Sería un poco vergonzoso decírtelo o hacerte llegar, todo este revuelco de palabras sin mayor sentido que la tinta en el papel, porque creo que olvidaste hasta mi nombre.
Quizás te avergüenzan mis años o mi forma de mirar, quizás no tienes tiempo ni de recordar. Solo sé por certeza que tomaste mis recuerdos para tirarlos al cajón bajo tierra que ni si quiera había muerto aún. Déjame decirte que te olvidaste de ser el culpable de que yo esté todo el día pensando en qué escribir. En escribir.
Me parecía pertinente aquél 11 mandarte algún inútil mensaje, algún gesto para reconocer tu existencia en esta vida. Pero en ese mismo momento recordé que probablemente tienes una mariposa en la cabeza que te lo hace saber más que cualquiera en este mundo.
Está mejor, todo está mejor que yo. Solo me apena saber que yo de vez en cuando, más o menos una vez por mes, recuerde que un segundo, quizás de millones, me hiciste bien.

Los trenes se llevan tantas cosas que nos quedamos pensando en eso y olvidamos la despedida. Olvidamos la manito que se mueve por la ventana diciendo adiós, porque eso fue lo que hiciste, ¿no? Claro, yo no sabía el valor del adiós hasta que te fuiste. Desde ahí odio los trenes, odio las despedidas. Quizás porque nunca supe en verdad como eran, porque me enseñaste otro sentido del adiós. 
Será por eso hoy no deseaba irme del bus, te cuento, querido amigo, en mi cabeza también revolotean ciertas cosas: pero éstas llegan al corazón. Son más que cosas, tú nunca supiste decírmelo, por eso te culpo y  te maldigo. Somos más que cosas. Pero no escribo este párrafo para culparte de mi fobia a las despedidas. Escribo este párrafo para contarte que he vuelto a sentir, y que no existe alguien que quiera hundirme; si no hubiese habido tanta movilidad en las calles habría dejado caer una que otra lagrimita para que mojara mi mejilla, y por qué no, la de él. Sí, escuchaste bien. Hay un él que no eres tú, espero no te suicides si algún día llegas a leer esto.
Me habría quedado, me habría quedado toda la vida a su lado. Quiero quedarme toda la vida a su lado, de su mano, de sus besos, de su piel en la mía y su cuerpo en mi cama.
No quiero perturbarte, pero el amor era más de lo que decían tus labios y tus falsos escritos de tierra y papel, el sexo es más de lo que tú llamabas: sólo sexo (el "sólo" lleva tilde cuando es eso y nada más, qué bien me enseñaste eh), la boca dice más que mentiras envueltas en llamas de carne y miel. No quiero hacerte sentir mal, pero ahora mi piel se eriza sin que la toquen, y es ahí donde le pertenezco, donde mi nombre se forma en su boca como si fuera una canción. Una canción de verdad, no esas que tú le enviabas a cualquiera.

En fin, "viejo amigo", algún día en tus habituales estados de destrucción deberías de leer esto, o probablemente deberías encenderle un cigarro a la carta que nunca te envié. Mis planes nunca funcionaron contigo, y es porque nunca funcionamos los dos.
Espero te alegres de que haya encontrado algo verdadero, yo me alegro de que hayas desaparecido del todo para no volver a recordar la tristeza en la que me hundiste.

Y como dijiste:
adiós.

Tela

¿Mi sueño?
Aquí está.


miércoles, 18 de junio de 2014

Pasitos.

En el aire y el mundo al revés
me deslizo por la suave sangre
que me mueve lentamente
me enamora y hace daño
como si fuera un sutil cuchillo
que entra por mi piel.

El viento entra en mis venas
y recorre mi cuerpo de mármol
para hacerla fluir,
mientras mis respiraciones medrosas
se esconden del peligro.

El cielo en mis pies,
y el infierno en mi cabeza.
Se me revuelven las tripas
cuando tú me dejas
caer.

qué ganas de estar ahí de nuevo
querida nueva compañera
de días
de soles
de lunas
de caracoles.
GRACIAS SEÑOR; ALELUYA!!!!!!!!!!
Letrear, letrear asignar. Terminar. De nuevo a la pantalla, enciendo, se enciende. Tycho suenas!
Llega un complejo de ruidos, se acercan voces, gritan, exclaman, aman, Cristo, oh Cristo. Sube la música, qué molesto. Subes, Llega también el ruido a mi techo, peculiar combinación entre la adoración, el cielo (mi cielo), y el ritmo. Sus micrófonos son como relámpago.

martes, 17 de junio de 2014

LDDb

Comunico:

Hoy entonces, me engrandezco al viajar sobre el frío asalto cada paso más sumisa de sus atrocidades, y lo haré mañana solamente por recordarlo.
Repito, me engrandezco, me vuelvo fabulosa.
Próspera me hace sentir el desprecio generalizado (y a su vez),
una inmensa sumisión a sus acciones,
porque aunque ni me rocen, sería capaz de vomitarles de cuando en cuando en sus pantallas,
pero no, estoy mintiendo, soy su esclava,
(y ser su esclava me hace sentir estúpidamente bien)
porque nos llenan el cerebro con dulces.

Hoy de nuevo y quizás,
me engrandezca de una falsa manera,
teniendo la intención de aludir a antiguas fogatas
(y puta que duele, siempre duele)
¿con qué propósito? Si lo único que logro es cavar el hoyo en el que me suicidaría o
echarle hielo a una caja del porte de una cama y dormirme en ella,
y sufrir de frío y no tanto por desesperación
(ojalá),
O tal vez no esté mintiendo, lo juro,
estoy re-ordenando mis emociones después de escuchar la (2ª) frase más temida
en todo el universo
(¡y puta que duele!) y eso
Me hace fuerte. Tan papel piedra cartón agua ¡moriste!
Me hace débil.


domingo, 15 de junio de 2014

pastilla número trece

Nos hundimos. Éramos como dos visitantes del mundo ansiosos por recorrer, curiosos, contempladores involucrados en la mitad de sus partes. Cuidadosos como siempre de las articulaciones de nuestras lenguas, expectantes por gritar y refugiarse. Paciencia absoluta, tal vez traducida a kilómetros de aquí, para que aparezca en forma sonora, lineal, cursiva, o alterna(tiva). Un calor que avanza en forma exponencial y seguro, atados a la tierra, como si ella fuese la seguridad absoluta. 
Hoy seríamos capaces de escondernos lejos de lo que esto, es, un bombardeo de pocas cosas poca-cosa, que nos llevan a lo que hoy estamos llevando, cada uno por su parte. 
Salvémonos entonces de alguna manera.
(aunque)
hoy no encuentro cómo

lunes, 9 de junio de 2014

como un lunes típico saliendo de noche y con extra/intra-frío
el asiento a las viejas por favor, 
no leer, comer, bostezar, 
averiguar una vez más sobre fanzines
decidir,
ordenar(me), 
a la cama, y a dormir.

sábado, 7 de junio de 2014

tres por tres

oh, una ranciedad
en su más puro estado
coincidencia del destino, o
una putada más
de esas que te manda la vida
(quizás hasta es elegida)

masacre individual
es siempre
estar frente a todos
a punto de reventarme 
en llanto

martes, 3 de junio de 2014

Macro

lo aborrezco
porque se vende
se presta para rumores,
y para mentiras
porque es un camino fácil
y no tanto tampoco,
a veces mal transitado;
porque es el segundo punto
de mi partida,
cada vez más desvalorizado,
y sobrestimado.

Me apena
como su generalidad
siendo incluso
parte de mi diario vivir.

Está
importa poco, casi nada
o más de la cuenta.

No, es solamente un escape
como la de las ventanas de los medios de transporte