No pasa nada, no pasa absolutamente nada.
Recuerdo mi última vez viajando con mis padres y el auto lleno de mis cosas hacia la costa. Su última ayuda oficial, si es que este año salgo de la U como se debiera. (¿qué mierda acabo de decir?).
Llegué,
ordenamos las cosas,
estaba feliz antes de eso.
Se fueron,
me despedí,
les vi irse de vuelta hacia nuestro ?¿ hogar.
Entré de nuevo a la pieza, vi todo, vi el entorno, vi la ventana que me encanta, me vi a mi misma.
No paré de llorar en horas, le tenía miedo a tantas cosas. Quizás a mí misma por sobre todo.
Más tarde fui a Valparaíso a una tocata que no disfruté ni mierda y sentía que en cualquier momento iba a ponerme a llorar por no aguantar a nadie cerca mío y tener que agradar y tener que disfrutar la música y tener que tomar y tener que saludar y tener que hablar sobre temas de mierda que realmente a nadie le interesan. No sé si tenía ganas de ir ese día, pero me comprometí, quería pasarlo bien.
Al final en la tocata misma no la pasé tan mal me dieron un agüita rica gratis en una botella de vidrio verde,
botella que perdí
más tarde me compré una gatorade azul pequeña y un tarrito de papas fritas
y conversamos mucho todos
yo tenía hambre
había comido nada
me compré una empanada,
conversamos cosas extrañas hasta tarde.
Al otro día, o ese mismo día, era día 29 de febrero.
¿Qué estaba haciendo hace cuatro años?
Sufriendo por un aweonao, efectivamente.
De nuevo en una pieza sola
de nuevo temiéndome a mí misma.
Los días siguientes fueron raros.
Salí a andar en bici varias veces, mientras en verano por las mañanas todo estaba mojado.
subí a una roca
miré la inmensidad del mar.
Fui también a playa ancha
subí unas rocas
miré el movimiento del mar.
Muy temprano, muy sola
(no tan sola en verdad)
Quería calmarme un ratito.
La semana siguiente fue mejor
me vino a ver B y yo lo quise mucho
peleamos por hueás, sí. Lo de siempre.
Pero sí sentía que lo quería infinito
(aunque eso sigue siendo presente yo creo).
Partió
estábamos tristes
entré a psiquiatra
me fue bien
me dijo que el quiropráctico no me serviría de nada (y eso yo ya lo sabía)
y que la siguiente vez (post semana santa) pediría de nuevo psicoterapia -gracias-.
Ví a la Camila en Valparaíso
comimos tocomples ricos
fuimos a viña a comer helado
fuimos a mi pieza
fuimos a quillota
al otro día me iba a llegar la regla
no me sentía bien, quería vomitar
Tenía que hacer un taller de cianotipia
nos fue bien
yo no estaba tan presente
Fui a la casa
Camila conoció al Guatón
Camila conoció mi casa
Fuimos cuatro en una camioneta de una cabina
mi mamá resplandeciente como ella misma, y yo a su lado para admirarla
fuimos a la casa de mi abuela
fue crudo, hablar de cosas que se esconden entre las tripas bien adentro perfecto para nunca salir
Hablarlas fue como rajarse la guata con un cuchillo y que entre todo lo que salía entre órganos sangre y otros fluidos, salieron palabras y lágrimas.
Más tarde nos volamos fuimos al club y me tomé un jugo guallarauco de frambuesa más rico que la conchetumare.
Fuimos a la plaza,
me sinceré con un aweonao que no se merecía mi confianza.
Al otro día era ocho de marzo,
yo no me podía levantar de todo lo que me pesaba.
Mi útero desangrándose, antes que todo.
Más tarde fuimos al parque con la Camila y en Alfonso.
Nos quisimos mucho
comimos pizzas
el funcho nos voló como nunca
mis neuronas ya no daban
el lunes fuimos a mi casa con la Camila
cocinamos
me hizo comer zanahoria de ensalada
la acompañé a comer de nuevo su helado a viña
Fuimos a mi casa
la acompañé al Uber afuera de mi casa
Al otro día fui al médico y luego me fui a la casa
dormí siestas con Guatón
Comí completos con una vienesa de soya más mala que la mierda
Al otro día volví a la costa
el jueves tenía pedaleo a Con-Cón
le presenté a mi bicicleta la playa la Boca y fuimos a tomarnos una infusión de Menta como pretexto para ir a hacer pipí gratis a algún lugar
nos quedamos mirando reventar una súper-ola en una roca
los colores estaban maravillosos desde que salió el sol
más tarde confié en quien no debí confiar
pero hice algo bien por mí misma
conocí una casa nueva de quien no debí confiar
me pegué un bongazo
bajé rápido
subí un ascensor
esperé horas
saludé gente
vimos unas proyecciones bacanes
se lanzó un libro que había comprado meses antes
volví a casa con mi gas pimienta en la mano como siempre desde que lo tengo
Dormí
Al otro día fui a Santiago
Casi me desmayé por no comer
Fuimos al Costanera
comí salmón
Javier me compró wantan
y me cargó mi mochila un rato para no morir
le acompañé a ver su wacom
Me acompañó a dejar mi cámara al doctor de cámaras
fuimos a comprar químicos
volvimos al terminal
pensé, "de esta no salgo sin el coronavirus"
(y sí salí de ahí sin el coronavirus)
Esperé una hora y media
Volví a Quillota
todo estuvo bien
El lunes fui a entrenar calistenia
me movilicé en bici entre el Cerro Recreo y el Cerro Esperanza
de vuelta me saqué la ctm
pero mi casco me salvó de algo bueno
me quedó una wea rara en el párpado inferior derecho
(creo que ese era mi ojo favorito)
(supongo que ya no tengo ningún ojo favorito)
Fui al taller
la pasé bien
llegó el famoso aweonadísimo a mi casa a pegarse el show
sin pretextos
sin fundamentos
con la tremenda perso del daño que me ha hecho y a pedir explicaciones
¿quién diría que un aweonao puede seguir siendo más aweonao todavía?
(un tremendo enigma por responder)
Volví a Quillota
Todo estaba bien
Todo existía desde el amor
Algo raro le estaba pasando a mi piel, le tenía ojo.
¿Qué más se le puede tener a la piel?
Fui a los pacos en la mañana
Tuve mi primera reunión de título en la tarde
(anulé lo que pasó los días siguientes)
Volví a la costa
tuve reunión
fui a comprar papel
fui al médico
me compré un banano
me compré unos lápices
quería salir a pedalear
fui al taller
almorcé pulento
fui a pedir hora al médico dos veces
fue una estupidez
me compré unos tabacos en la calle
hace rato no fumaba un poquito
Y bueno, desde esos días, volví a sacar fotos otra vez.
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